miércoles, septiembre 20, 2006

LAPONIA FINESA


Como estoy toda la semana liada con un curso y no hay muchas novedades os contaré uno de mis viajes preferidos. Fue a Laponia en 2004. Me ha resultado difícil elegir sólo una imagen de este viaje, pero ahí está. La foto está tomada en el rompehielos Sampo, el único del mundo que admite pasajeros. El gorro es sami, las puntas del mismo simbolizan la estrella del norte y unas cintas de colores que cuelgan son las banderas(cada una de un color) de distintas poblaciones samis. Este gorro que se ve es el de los hombres, el de las mujeres es una especie de cofia, pero en las ciudades todos llevan el mismo, chicos y chicas, es muy típico. Sigo donde me he quedado, el rompehielos. Es una suerte poder haber disfrutado de esta experiencia, porque ahí donde me veis estaba a punto de darme un baño en pleno mes de Diciembre en el Golfo de Botnia. Por supuesto te bañas con un traje especial de neopreno, más que nada para evitar una muerte segura de hipotermia en menos de tres minutos. A mitad del trayecto el rompehielos para y literalmente pisas el mar. La capa de hielo hacia el fondo puede alcanzar hasta 23 metros de profundidad. Las sensaciones de encontrarte de pie en mitad del mar son realmente indescriptibles. El baño es divertido porque flotas aunque para otras personas fue una emoción demasiado fuerte y casi rozaban la histeria. Nos bañamos de noche porque en diciembre a las dos del mediodía ya no hay luz. A continuación hubo un temporal de viento y nieve y realmente parecía que estábamos en el fin del mundo. Ni que decir que, aunque uno no se decida a darse un baño, merece la pena subir al rompehielos y disfrutar de un paisaje de esos que quitan el hipo.
En este viaje tuvimos ocasión de disfrutar de largos paseos en motonieve por encima de los lagos congelados de Rovaniemi,(Finlandia es el país de los mil lagos aunque en invierno sean auténticas pistas de patinaje). Montar en trineo, visitar una granja de renos y otra de perros huskies, ver a Joulu Pukki(Papá Noel)en persona y la preciosa ciudad de Napapiiri donde vive y que está situada justo bajo la línea imaginaria del círculo polar ártico. También vino a visitarnos al hotel con su reno Rodolfo. Adentrarse en cualquiera de sus bosques nevados es como formar parte de un cuento o de una postal de navidad. Hasta el cementerio de Rovaniemi es precioso, lleno de velas encendidas entre la nieve.
Todos los momentos son inolvidables pero recuerdo especialmente la sensación de frio en mi rostro y el sonido de los pasos al caminar en la nieve. Nos gustó tanto que este año repetimos pero con nuevas aventuras, entre ellas una cena nocturna en el bosque para disfrutar en la noche de la aurora boreal, será en diciembre si todo va bien, ya os contaré. Saludines.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Nena, con estos comentarios nos das mucha envidia...

Yo, casi que me apunto tb... aunque luego viene Pe y nos toca plantar árboles a diestro y siniestro...

O peor, ir en bici!!!!!!!!!!

Y eso que ayer todavía me hice la siesta en la playita... qué frio!

Besets

Lorena dijo...

¡Hola Leo!, pues nada, ya sabes, hay que hacer una hucha y nos vamos.
Empecé a ir en bici el martes y ya no la dejo, será mi medio de transporte, como en Holanda o en Dinamarca. Debo de tener hecho un lavado de cerebro. Nosotros hacemos una cosa, hay una empresa que te cobra lo que contaminas. El último viaje en avión calculó lo que contaminábamos dos personas en avión con los kilómetros que duraba el trayecto, en total Laponia 25 euros, los donas y ellos plantan los árboles por ti¿que te parece?.
Hija, yo casi estoy apunto de ponerme una manga larga finita y tu de playa, jajajajaja... nada, ya hablaremos, besiños.

Perico dijo...

Leo, que te sigo de cerca, así que no me busques.......je, je,..

Saludetes.

servidora dijo...

"El día 19 de diciembre :-) del año de Nuestro Señor de 19.. nos encontramos en nuestro buzón los billetes para un viaje por ferrocarril a Kemijärvi, con paradas en Bentheim, Brema, Odense, Copenhague, Estocolmo, Haparanda y Rovianemi. Sobre una corteza de abedul, blanca como la nieve, en minúsculas letras grabadas en cobre, se leían estas palabras: ¡Venid; tenemos graves asuntos que discutir!.

El mensaje no podía proceder sino de los gnomos, a quienes no podíamos dejar de hacer caso. Para mayor perplejidad nuestra, comprobamos que Kemijärvi está en Finlandia, cerca del Círculo Polar.[..] ¿Laponia en invierno? Era un poco preocupante.[..]

...y poco después cruzábamos hasta Hälsinbörg. Durante el día, mientras recorríamos el sur de Suecia, el tiempo mejoró un poco; sobre ese país voló Niels Hogersson en Maarten, el ganso blanco; [..]

A medida que ascendíamos por la costa del Golfo, las horas con luz del día se iban acortando y no veíamos más que alces. Comprendimos que no habría más de tres horas de luz natural en Kemijärvi, a causa de su proximidad con el Polo Norte. [..]

Desde que salimos de Haparnada, el viento creció hasta hacerse tormentoso. Entre Rovaniemi y Kemijärvi el tren se detuvo entre sacudidas y chirridos, [..]. Pasado algún tiempo, el revisor entró en nuestro compartimento.[..] era un hombre pequeño y enjuto, de rostro amarillento y rugoso y cabello negro azabache [..] Perdónenme, caballeros dijo en un chapurreado idioma Soy lapón. He recorrido todo el mundo pero he conservado la facultad de captar los mensajes lejanos. Sé quiénes son ustedes..."

("La llamada de los gnomos" de Rien Poortvliet y Wil Huygen)


Y hasta aquí puedo leer ;-) Parece que por esos lares la concentración de gnomos (y jefes de gnomos ;-) es bastante grande :-)

bezoz..

Lorena dijo...

¡Qué bonito este pasaje Gloria!, precioso, precioso, me ha hecho revivir algunas sensaciones. La verdad es que hay muchos gnomos, sobre todo en Dinamarca, Suecia y Finlandia, en Noruega hay muchos trolls, tendré que hablar de los trolls un día de estos, ya vereis que mundo más interesante. Gracias por escribirlo en mi blog, lo he leido tres veces. Bezoz, jajajajaja

Anónimo dijo...

Lole....... tengo que ir mirando lo del monumento y la plaza con tu nombre (quizá si hablo con Mulet...).

Es realmente una gozada que cualquiera en este Planeta pueda disfrutar de lo que otros (grupo algo más reducido-aunque no mucho :-) ya lo hacemos desde que te conocemos.

Leerte, como escucharte, es vivir más intensamente, conocer más de este ancho y extraño, pero maravilloso Mundo mundial y sobre todo... volver a la niñez, con buenas dosis de inocencia y más de bondad (y no es que las brujas sean conocidas especialmente por estos rasgos). Pero..., lo dicho. Sin perjuicio de encontrar tarde o temprano la escoba voladora adecuada, mientras... veo lo de la plaza (si se queda en calle no pasa nada ¿eh?; miraremos que por lo menos sea ancha y luminosa :-)

Muaaaaaaaaaaaaaa